"¿Desde cuando la mediocridad y la banalidad se convirtieron en buenos ejemplos para nuestros hijos?"-Bill Hicks, Profeta-
La prole del antaño "Fresh Prince" ataca de nuevo. Por si no fuera suficiente con el hijísimo haciendo truñacos del tamaño de Kung Fu Kid, ahora su hija, una niña de diez años con delirios de Rihanna ha debido comentarle a su padre que quiere embarcarse en el maravilloso mundo de la música mainstream.
Y como su padre es Will Smith, en lugar de darle la correspondiente colleja y decir "Anda, deja de decir chorradas y comete la cena", llamó a Jay-Z y los chicos de Roc Nation que decidieron darle la oportunidad de grabar un disco. Así, Willow Smith (que es como si su hermano Jaden se vistiese de niña) ha presentado en sociedad hoy su primer videoclip, sobre el sencillo que presentó hace un par de semanas: "Whip my Hair".
¡¡Pero qué coño!! ¿He escuchado un "Rihanna" por ahí?
Amigos, ha nacido la Hannah Montana negra. Todo lo que compone este producto (porque creo que podemos dejar de considerarla un ser humano y podemos empezar a tratarla como lo que es, un producto musical prefabricado) es para mear y no echar gota. Una producción que tira de autotune (sutil, se nota que estamos ante profesionales, pero ahí está) para darle a la niña un vozarrón que me cuesta creer que tenga. Ese tono Rihanna (otro gran descubrimiento -pasaba por poco los 18 cuando su primer sencillo) tan, "marca de la casa", el break dance, el portero que aparece de pronto en el video...
En fin, no voy a decir más porque la niña no tiene culpa de nada. No tiene culpa de tener unos padres obsesionados con catapultar la vida mediática de sus vástagos, aunque para ello deban convertirla en el contrapunto negro de todas las canciones que salen de la factoría de Disney Channel.
De todos modos creo que los Smith están orientando mal a su nuevo producto prefabricado, y es que si tu primer disco lo está promocionando "movistar joven" significa que algo está podrido en Dinamarca...
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