Last Night On Earth


Noah & The Whale es una banda inglesa que empezó su andadura allá por el 2007. Después de sacar un disco, cuando aún les acompañaba haciendo los coros una jovencísima Laura Marling (motivo por el que conocí a Laura) que en aquel momento estaba saliendo con el cantante, Charlie Fink, publicaron un disco bastante decente que mezclaba folk con pop y que resultaba de lo más atractivo. El disco se llamaba "Peaceful, The World Lays Me Down" y aunque solo sea por temas como "5 years time", "Mary" o la que abre el disco "2 Atoms in a Molecule" merece la pena la escucha.

Entonces un día Charlie y Laura rompieron. Ella abandonó el grupo (y se hizo coleguita de otra banda de Folk moderna, Mumford & Sons) y Noah & The Whale publicó su segundo álbum en 2009, "The First Days of Spring", toda una presentación de la ruptura sentimental del líder y la ex-miembro de la banda. El segundo disco es mucho menos positivo que el primero, y aunque instrumentalmente está algo más trabajado, la melancolía de corazón roto que llena todas las canciones puede cansar. Tiene muchos grandes temas, como el homónimo "The First Days of Spring" o "My Broken Heart", pero el cambio de tono (de algo animado y positivo a una oda al desamor) no les favorece demasiado.

Dos años después Noah & The Whale han vuelto con "Last Night On Earth", un tercer disco que poco o nada tiene que ver con todo lo que llevan haciendo hasta ahora. Para bien o para mal.

Desde "Life is Life", que abre con una base electrónica extrañísima en la banda, ya te das cuenta que las cosas han cambiado. De ser una banda que hizo un disco de Folk-Pop, y un segundo disco integramente Folk, este cambio al Pop más absoluto que recuerda a los peores "The Killers" sorprende. Los sintetizadores continúan martilleando durante la practica totalidad del disco en un cambio de registro que no les sienta nada bien y que los coloca como carnaza de B.S.O de series teen. Estos nuevos "Noah & The Whale" abandonan el folk que les caracterizaba en pos de un sonido más comercial, un cambio que, salvando las distancias (porque al menos esto es escuchable) no deja de recordarme al cambio de registro que sufrió (y sigue sufriendo) "Dover".

Con todo el disco se deja escuchar más o menos. Gustará a la gente a la que le gusten "The Killers", que es como no decir nada, porque al que le gusten "The Killers" (o al menos, que les guste eso en lo que les ha convertido el eunuco de Brandon Flores) no es que tenga un gusto musical que tomar como referencia (llamadme nazi, pero es que odio a The Killers). Personalmente el cambio de registro no me gusta nada, no son lo puto peor, pero prefiero las depresivas canciones de "First Days of Spring" y el positivismo inocente de "Peaceful, the world lays me down" a esto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario